“dos cabezas piensan mejor que una”. Caemos constantemente en el proceso de mantener las cosas armoniosas y eficientes con nuestro equipo de trabajo. La colaboración de un grupo de trabajo puede no ser satisfactoria por las normas culturales que nos dicen que debemos pensar igual, siempre apoyar las ideas de otros y nunca dejar de sonreír. La colaboración está en un punto urgente de tener un poco más de debate.
Probablemente te enseñaron a ver la colaboración y el conflicto como completos opuestos. En algunas culturas el lenguaje del trabajo en equipo está idealizado. Se supone que como equipo todos tienen que estar en el mismo canal. Estas ideas de colaboración están haciendo a muchos equipos de trabajo impotentes.
No hay punto en la colaboración si no se dan las diferentes ideas dentro del equipo de trabajo. Hay que mejorar la calidad de las ideas y para eso es importante retarnos entre el equipo para generar el valor del contenido. Es momento de cambiar tu idea sobre el conflicto. Deja ir la idea de que el conflicto destruye. Tu nuevo mantra debería de ser que el conflicto productivo crea valor.