México ocupa el lugar 46 entre los 60 analizados en cuanto a la intención de las personas de convertirse en emprendedores. Los datos arrojan un resultado claro: un estruendoso suspenso, especialmente para la mujer emprendedora.
La siguiente pregunta que hay que hacerse es ¿Por qué? Leyendo el informe, del que más abajo les compartimos un enlace gracias a El Pulso Laboral, las dos primeras lecturas son claras: la falta de ambición, por un lado, y el escaso apoyo que hacen estos pequeños emprendedores en las nuevas tecnologías.
En lo que nos respecta a las mujeres, los datos son incluso peores, puesto que mientras el porcentaje de hombres dispuestos a emprender es del 23%, en mujeres apenas es del 19%.
Desde GirlPower no queremos decirles en qué tienen que trabajar, pero sí que sean valientes en perseguir sus sueños. Somos personas que estamos preparadas como para salir adelante en cualquier desempeño laboral que nos planteemos, así que ¡Sigamos adelante!
Estos son los resultados del informe:
Reprueba México en iniciativa emprendedora
México ocupa el lugar 46 de 60 países en cuanto a la intención de ser emprendedor, revela Global Entrepreneurship Monitor (GEM) promovido por el Instituto Tecnológico de Monterrey (ITESM).
Esto significa que
apenas el 19 por ciento de la población tiene intenciones de iniciar un negocio en los próximos tres años y 49 por ciento de la población adulta aprecia el emprendimiento como una opción de carrera deseable.
Por si fuera poco, el estudio señala que el nivel de calidad de los proyectos de negocio son
limitados en materia de generación de empleos.
“
En México, el 10 por ciento de los nuevos negocios espera generar más de 6 empleos, mientras que en Estados Unidos mostraron niveles más altos, con un 32 por ciento de emprendedores proyectando este potencial de empleo”, destaca.
A pesar de este escenario poco optimista, cada vez son más las personas que intentan hacer negocio, explicó Elvira Navarro, investigadora del GEM.
Sin embargo, advirtió, es necesario distinguir entre la cantidad y la calidad de los emprendimientos.
“Por lo general son
negocios de poco valor agregado que no hacen uso de tecnología o se encuentran en sectores tradicionales”, añadió.
Dicho reporte exhibe que en todas las economías, las tasas de mayor participación se encuentran entre las
personas de 25 a 44 años de edad, personas en el inicio y mitad de su etapa productiva.]]>