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Cómo formar parte de un equipo

Abriendo fronteras Es importante desarrollar relaciones con la familia y amigos de nuestro compañero, ya que son parte fundamental de su vida. Para ello, será necesario buscar oportunidades en donde sea propicio desarrollar vínculos duraderos. Por ejemplo, estar abierto a salir con sus amigos(as) o buscar ir de viaje con su familia; aún y cuando en un principio pueda ser incómodo ser la nueva en el grupo. En el ámbito profesional, mejoraremos nuestro desempeño al tener contacto abierto con los diferentes actores de la empresa. Aquel empleado que logra construir una red fuerte dentro y fuera de su empresa, suele tener mayor éxito. Por un lado, tener un equipo consolidado sirve como base de apoyo cuando es necesitado. Por otro, contar con una red amplia y distribuida generalmente se traduce en mayor acceso a información. Las relaciones de equipo están basadas en confianza. En un trabajo, es importante confiar en las habilidades de tu equipo para poder desarrollar la tarea en cuestión. Además, debes poder confiar en el nivel de compromiso de cada uno de los miembros. Por último, es necesario confiar en que el equipo buscará darte retroalimentación y ayudarte para seguir creciendo. Construir un buen equipo no es fácil, pero empezar por tener comunicación abierta y confianza es una buena base. Una relación amorosa puede ser mucho más agradable si disfrutas estar cerca de las personas que rodean a tu pareja. De igual forma, es fundamental abrir nuestro entorno para que nuestra pareja entre en él. Estas relaciones se construyen al invertirles tiempo y energía. Siempre es mejor mantener una actitud positiva para romper el hielo y lograr convertirnos en parte del grupo. Ganarte y valorar la confianza de sus amigos y familiares te permitirá desarrollar lazos más fuertes con cada uno de ellos.

Marcando límites

Asimismo, el inicio de una relación es una buena oportunidad para marcar límites con los diferentes equipos en tu vida. Al dejar en claro cuál será tu lugar desde un inicio, evitarás muchos problemas en el futuro. Cada pareja tiene su propio esquema de colaboración con terceros. Para algunas, resulta efectivo designar ciertos días de la semana para ver a los amigos. Para otras, la dinámica es más improvisada y el balance se va dando de forma espontánea. Hay parejas que disfrutan enormemente de la compañía de sus familias políticas y planean todos sus fines de semana en torno a ellos. Por otro lado, hay quienes prefieren limitar estas interacciones a fechas especiales como el Día de las Madres, Día del Padre o Navidad.

Lo importante es tener la apertura para conversar con tu pareja y llegar a acuerdos que sean aceptables para ambos.

Independientemente del patrón que deseemos seguir, el inicio de una relación es una buena oportunidad para abrirnos a conocer a las personas cercanas a nuestra pareja. Tomemos la oportunidad para sumar y hacer equipo con nuestros seres queridos.]]>