Girl Power

Acéptalo. Preocuparte no te lleva a nada.

“Hablar con el maestro. Ir a llevar las bolsas reciclables al final de la calle. Leer. Ir al gym. Cargar a la bebe toda la noche mientras llora. Escribir en mi blog. Salir el fin. Comer con mi mamá. Cocinar la cena. Como reduzco mi marca de carbono. Esos zapatos que vi el jueves pasado. Me duele la cabeza. ¿Estoy tomando suficiente agua? El proyecto de ciencias. Depilarme.”

Nuestra energía se dispersa cada vez que intentamos completar una de esas tareas. La atención se va por tubitos que no sabíamos que existían. Todo esto no me hace sentir viva y llena de energía.

Esto me agota. 

Puedes no considerarte una persona que toma acción ante situaciones. Pero sobre todo cuando tiene que ver con ESTO en específico. Preocuparte. Usamos lo que queda de nuestra energía del día a día en preocuparnos por no poder completar nuestras tareas.

Lo peor de todo es que el hecho de preocuparnos nos hace sentir ocupadas. Estamos dándole tantas vueltas a tanta información que nos cansamos pero no hacemos mucho. Gastamos energía que sí necesitamos.

Nunca estaremos seguras de lo que nuestra acciones diarias pueden tener como repercusiones. No sabemos como pueden alterar nuestra vida a futuro. Lo único que si podemos controlar es tratar de hacer la mejor decisión, con las herramientas que tenemos en ese momento. En la vida no podemos hacer todo, pero si podemos hacer algo.

La única forma de derrotar la preocupación, es hacer algo intangible, tangible.

Es muy probable que no pueda escribir un libro completo esta semana. Pero sí puedo escribir algunas páginas. Puedo no ser capaz de inscribirme a todas las clases que quisiera; pero puedo inscribirme a la que más me llame la atención.

Eso es tomar acción diario. Eso es hacer algo, aunque sea chiquito todos los días. No llenes tu cabeza hasta saturarla. Toma las cosas con calma y haz una a la vez.

]]>